A pesar de que se estima que algunas sedes de coworking cerrarán para finales del 2020, se prevé que la demanda como la oferta dentro de este tipo de empresas crecerá sustantivamente en los próximos meses.
Aun con el llamado “efecto WeWork” y las consecuencias del desaceleramiento en adquisición de espacios de este gigante americano, el mercado de las coworking se proyectaba a lograr superar los 140.000 m2 en stock de espacios este 2020, de acuerdo a José Rubén Velarde, Vicepresidente de Desarrollo de Negocios en Credicorp Capital, en una entrevista para El Comercio. Por ello, el enfoque se encuentraba puesto en un solo concepto: eficiencia para lograrlo.
Sin embargo, con las nuevas medidas de distanciamiento social a causa del COVID_19 presente en nuestras vidas y la implementación del trabajo remoto; Max Medina de Bingswanger señaló para el mismo medio que al menos 10 sedes de coworking se cerrarán para finales de este año. A causa de ello, las empresas dedicadas al alquiler de espacios de trabajo, así como locales comerciales han tenido la necesidad de reinventar su modelo de negocio para responder ante las nuevas necesidades del mercado.
En este sentido, Ernesto de Olazával, cofundador y Gerente General de Comunal, una de las empresas con mayor participación en el mercado de las coworking, declaró para El Comercio que este momento es clave en tanto que permite que la oferta que estas tienen, resalte. ¿Cómo? De la forma en la que ya se ha venido trabajando: con contratos más accesibles y ofertas inclusivas que consideren a startups, pequeñas empresas, grandes y medianas.
No obstante, esta oferta debe complementarse con la implementación de un buen protocolo de salud para evitar la propagación del virus. Al respecto, entre algunas de las nuevas propuestas que trae el mercado de las coworking en Perú se encuentran:
- Mobiliario COVID para oficinas
- Modificación de módulos de atención
- Oficinas satélite
Esta última medida precisamente es la que nos llama más la atención dado que está presente en el mercado internacional latinoamericano desde el año pasado en países como Argentina. Sin embargo, precisamente ha sido el COVID_19 el que ha acelerado su llegada a nuestro territorio y que supone todo un cambio en la forma en la que conocemos el alquiler de espacios.
Los primeros en implementar las oficinas satélite en Perú y traer esta propuesta son los dueños de Kracks, una coworking que actualmente posee 185 m2 en su stock. Con el servicio Kracks Home Office, la compañía busca hacer una realidad el hecho de trabajar de forma remota desde una ubicación cercana a casa.
La propuesta de las oficinas satélite es básicamente la de alquilar distintos pequeños espacios en distintas sedes de una coworking para que los trabajadores de las compañías que alquilan cuenten con un lugar en el que realizar sus labores y les quede cerca de casa.
“Le ofrecemos a una sola empresa la posibilidad de unir a sus ejecutivos que están cerca a Miguel Dasso y que los pueda albergar ahí con todas las medidas de seguridad”, señaló Juan Alberto Flores, Gerente General de Kracks al respecto de este nuevo proyecto a El Comercio.
Por su parte, Comunal también se encuentra trabajando una propuesta de oficinas satélite. En su caso, la propuesta es más ambiciosa en tanto que esta coworking cuenta con sedes en San Isidro, Miraflores, Magdalena, Surco y Barranco. Al respecto, Olazával, indicó también para El Comercio: “La tendencia a mediano plazo será ampliar este anillo”.
Del mismo modo, la alternativa que brinda Comunal con su propuesta de oficinas satélite también es la de trabajar de la mano de la rentabilidad en tanto que una empresa que cuente con 100 trabajadores, podría ahorrar gastos al alquilar solo 40 o 50 escritorios debido a que puede implementar un sistema rotativo por días u horarios. Esto como forma de efectivizar el tiempo en oficina y también mantener los protocolos de seguridad y salubridad.
Trabajo remoto en Perú: ¿Cuál es el panorama para las coworking?
Si bien las coworking se verán afectadas en cifras totales para este año, de acuerdo a Bingswanger, no sucederá así a largo plazo. Según el análisis realizado por esta inmobiliaria, la reciente pandemia por el COVID_19 ha puesto para el consumidor promedio en realce el valor de la rentabilidad dentro de una inversión.
Con frecuencia, las compañías que alquilan oficinas prime son aquellas que provienen de empresas de gran tamaño y tienen el capital para realizar esta clase de inversiones. Asimismo, buscan mantener un grado de control dentro de sus actividades y operaciones, lo cual hace justificable para ellos este gasto. Sin embargo, entre las empresas que alquilan oficinas prime están también aquellas que lo hacen por costumbre pero que no reciben ningún tipo de rentabilidad al realizar estas operaciones. Y son estas precisamente las que se han visto más afectadas en la cuarentena.
Debido a ello, Bingswanger estima que este tipo de empresas comenzará a valorar mucho más las propuestas de las coworking. Pero, el impacto de este tipo de operaciones más inclusivas de alquiler no solo crecerá en términos de incremento de demanda, sino también de oferta.
Por su parte, Bingswanger señala que las empresas arrendadoras de oficinas prime verán también los beneficios de trabajar también como una coworking. Ello principalmente como consecuencia de que existe una proyección a que el trabajo remoto continúe en el 2021 y de que con lo ocurrido en Francia por el incremento de casos de COVID_19 y retorno a la cuarentena estricta, lo más probable es que nos toque afrontar ese escenario nuevamente. A raíz de ello, lo que se estima que busquen las empresas arrendadoras es dinamizar su oferta para hacerla más inclusiva y obtener más liquidez.
Por ello, para Bingswanger, el mercado del coworking irá en crecimiento durante los próximos meses, con ofertas más asequibles para pequeñas y medianas empresas que requieran de estos espacios de comunicación y trabajo con su equipo.
Relacionado a este tema, te recomendamos leer: HomeOffice en Perú: Desafíos y soluciones para un manejo eficiente
One Response