Por: Karol Valencia, Cofundadora y Head de diseño Legal en WOW Legal Experience
Cada vez existen más perfiles de profesionales híbridos demandados por el mercado laboral. Me refiero a aquellos puestos de trabajo que combinan habilidades de diferentes disciplinas.
Al ver la cantidad de anuncios de empleo solicitando este tipo de profesionales, me surgen varias preguntas: ¿existen ya esos perfiles híbridos en el Perú?, ¿cómo se construye un perfil profesional híbrido?, ¿reemplazarán a los profesionales tradicionales?, ¿qué tan abierto está el mercado a contratar realmente a este tipo de perfiles?
Déjenme contarles mi experiencia desde la disciplina del Derecho, la cual es mi especialidad.
Currículas readaptadas
Si echamos un vistazo a la currícula y programas de algunas universidades nacionales y, con mayor incidencia, en el extranjero, empezamos a encontrar términos anglosajones y otros poco comunes a la especialidad jurídica tradicional. Me refiero a los siguientes: Diplomado en Derecho y nuevas tecnologías; legal tech; legal design; legal project management; legal operations; transformación digital del sector legal; programación para abogados; metodología AGILE para abogados; entre otros.
También, ya existen reclutadores que buscan profesionales legales híbridos, para todos los tipos de equipos legales que existen: equipos legales in-house, equipos legales de despachos, equipos legales de holdings, entre otros.
El mercado de perfiles híbridos
¿Ya existen perfiles legales híbridos en nuestro país? Sí. Con humildad, me reconozco dentro de ese grupo de profesionales con perfiles híbridos. El mío es un perfil que hasta tiene un nombre raro: legal designer. Se trata de una especie de combo entre un diseñador UX con amplio conocimiento del sector legal. En mi caso, he pasado por varios roles de diseño como la investigación o research, el diseño de servicios y productos hasta llegar al diseño de experiencias. De hecho, éste es el que más me gusta.
Conozco más perfiles similares o iguales al mío en el Perú y en el extranjero. Realmente, me llena de orgullo ver cómo nos terminamos dando cuenta de que la carrera de Derecho, tan aparentemente estructurada y rígida, termina siendo dúctil y puede dar pie a desarrollar otros roles y habilidades al ser una ciencia que forma parte de Humanidades.
¿Cómo se construye un perfil profesional híbrido? En mi caso, todo se fue dando poco a poco. Como dicen mis alumnos, “fue fluyendo” de manera natural. Pero no siempre es así. Mi camino en el diseño se debe a mi primer trabajo en el extranjero. Laboraba en una startup del sector fintech y trabajaba en constante comunicación con el equipo de diseño.
El diseño me envolvió por el contacto con las humanidades y la fuerza en la empatía que creo que todos los que trabajamos en el sector legal tenemos bastante desarrollada, ya que los abogados somos consejeros muchas veces.
En otros casos, el perfil profesional legal híbrido puede nacer desde la curiosidad, las mejoras que deseamos implementar en nuestro día a día o, incluso, el mero gusto.
¿Estos perfiles híbridos reemplazarán a los perfiles tradicionales? No lo creo. En la actualidad, no son muchas las facultades que se animan a incluir cursos que incentiven a los abogados a degustar otras áreas profesionales, aunque sí van en aumento. Al menos en el Perú, las facultades de Derecho siguen teniendo una currícula principalmente dirigida a formar “abogados tradicionales”, lo cual no es ni malo ni bueno.
¿Qué tan abierto está el mercado a contratar perfiles híbridos? La respuesta varía para el caso nacional e internacional. En el ámbito nacional, son muy pocos los puestos ocupados por profesionales legales híbridos. En su mayoría, los pocos puestos que encajan en este perfil son desempeñados por abogados tradicionales o por profesionales de otras carreras, según la empresa y perfil requerido.
En cambio, en el mercado legal internacional, la demanda de perfiles legales híbridos es basta, pero los requisitos son excesivos. Por eso, muchas veces estos puestos son ocupados por profesionales que no son abogados.
Invito a los profesionales de otras disciplinas a analizar lo que está sucediendo en su sector. ¿Cuáles son los perfiles híbridos que han surgido?
