¿Cuándo las empresas deben renovar sus equipos informáticos?

31 Enero, 2025 / Tiempo de lectura: 4 min.

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¿Cuándo las empresas deben renovar sus equipos informáticos?

La tecnología es un pilar fundamental para cualquier empresa, y asegurarse de que los equipos estén actualizados es esencial para mantener la productividad y competitividad. Sin embargo, muchas empresas se preguntan: ¿cuándo es el momento adecuado para renovar las laptops o PC’s? Aquí te mostramos las señales de obsolescencia y su impacto en el ámbito laboral.

Cuando una laptop comienza a ralentizarse incluso en tareas simples como iniciar el sistema operativo, abrir hojas de cálculo o navegar por internet, se convierte en un obstáculo para la productividad. Esta lentitud generalmente se debe a procesadores desactualizados, memoria RAM insuficiente o discos duros que ya no operan con eficiencia. 

Según un informe de IDC, un equipo lento puede hacer que un empleado pierda hasta 42 horas al año, lo que se traduce en un impacto económico considerable, especialmente en empresas con grandes equipos de trabajo. Esta pérdida de tiempo no solo reduce la eficiencia operativa, sino que también genera frustración en los empleados, afectando su motivación y desempeño.

2. Incompatibilidad con software o sistemas operativos recientes:

Los avances tecnológicos han hecho que los requisitos de hardware para los sistemas operativos y software sean cada vez más altos. Si tus equipos no son capaces de instalar versiones modernas de sistemas como Windows 11 o aplicaciones esenciales, esto limita la capacidad de tu empresa para mantenerse actualizada. 

Por ejemplo, herramientas colaborativas como Microsoft Teams o sistemas de análisis como Power BI requieren especificaciones mínimas que los dispositivos antiguos no cumplen. Además, los equipos incompatibles pierden acceso a parches de seguridad, lo que incrementa el riesgo de ciberataques.

3. Batería con duración significativamente reducida:

La portabilidad es uno de los principales beneficios de las laptops, pero este se pierde cuando la batería tiene una duración limitada o no puede mantener una carga más allá de una hora.

Las baterías de litio suelen degradarse después de 2 o 3 años de uso intensivo, según Battery University, lo que obliga a los usuarios a depender de cargadores constantemente. Este problema afecta especialmente a los empleados que trabajan en campo o realizan reuniones fuera de la oficina, reduciendo su productividad y flexibilidad.

Además, reemplazar las baterías suele ser costoso y, en equipos más antiguos, puede no ser una solución viable debido a la limitada disponibilidad de componentes.

4. Problemas frecuentes de hardware:

Las fallas en componentes como la pantalla, teclado o puertos USB son señales claras de que el equipo está llegando al final de su vida útil.

Según un análisis de TechRepublic, el 37% de las laptops de más de 5 años presentan problemas de hardware recurrentes, lo que genera interrupciones en el trabajo y costos constantes en reparaciones. Estas fallas también pueden ser una fuente de frustración para los empleados, quienes pierden tiempo buscando soluciones temporales. Por ejemplo, un puerto USB defectuoso puede ralentizar tareas simples, como transferir archivos o conectar periféricos esenciales.

5. Calentamiento excesivo:

El sobrecalentamiento es una de las señales más evidentes de desgaste interno en los equipos. Si una laptop se calienta rápidamente, incluso al realizar tareas básicas, puede ser un indicio de que los componentes internos, como el procesador o el sistema de refrigeración, están deteriorados. Este problema no solo afecta el rendimiento, sino que también incrementa el riesgo de fallas permanentes en el hardware.

Según un informe de Intel, el rendimiento de un procesador puede reducirse hasta un 30% cuando opera constantemente a temperaturas elevadas, afectando directamente la productividad del usuario.

6. Escalabilidad limitada:

A medida que las necesidades de las empresas evolucionan, también lo hacen los requisitos tecnológicos. Sin embargo, muchos equipos antiguos carecen de la capacidad para adaptarse a estas demandas. La imposibilidad de actualizar componentes como memoria RAM o almacenamiento limita la vida útil del equipo y obliga a reemplazarlo por completo.

Esto es especialmente problemático en sectores como el diseño gráfico, donde los programas modernos exigen más recursos. No poder escalar los equipos significa que la empresa pierde flexibilidad y competitividad frente a sus rivales que sí adoptan nuevas tecnologías.

7. Insuficiente capacidad de almacenamiento:

Con el crecimiento exponencial de los datos en el entorno empresarial, el espacio de almacenamiento se convierte en un recurso crítico. Las laptops con discos duros saturados no solo enfrentan dificultades para guardar archivos, sino que también ven afectado su rendimiento general.

Mensajes frecuentes de “Espacio insuficiente” interrumpen el flujo de trabajo y obligan a las empresas a invertir en soluciones externas, como discos duros portátiles o almacenamiento en la nube. Estas alternativas, aunque útiles, generan costos adicionales que podrían evitarse con equipos más modernos y con mayor capacidad de almacenamiento.

8. Los costos de reparación superan el precio original del equipo:

Cuando el costo de reparar un equipo comienza a superar el 50% del precio de una laptop nueva, es momento de considerar su reemplazo. Según Gartner, los costos de mantenimiento aumentan un 70% después del quinto año de vida útil de un equipo, lo que convierte a la reparación en una solución insostenible a largo plazo. Además, los tiempos de inactividad mientras los equipos están en reparación afectan la productividad y generan incertidumbre entre los empleados.

Las señales de obsolescencia en laptops y PC’s son un llamado de atención para las empresas. Ignorarlas puede generar un impacto negativo significativo en la productividad, la moral de los empleados y los costos operativos. Además, trabajar con tecnología desactualizada aumenta los riesgos de seguridad y limita la capacidad de la empresa para innovar. Identificar y actuar sobre estas señales a tiempo te permitirá mantener una operación eficiente y garantizar que tu equipo cuente con las herramientas necesarias para alcanzar sus objetivos.

Si reconoces alguno de estos problemas en tus laptops o PC’s, es hora de planificar una renovación de tu parque que impulse la competitividad de tu empresa. El alquiler de laptops te ayuda a modernizar tu equipo sin una gran inversión inicial, brindándote acceso a tecnología actualizada y soporte para cualquier inconveniente.

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